VOLUBILIDAD

El hombre (y la mujer, no quiero discriminar por razón de sexo) es esencialmente voluble. De carácter inconstante. La volubilidad es como una teoría de las ideas. Su concepto. René Descartes (el último gran filósofo francés) llama «Absoluto» a lo que contiene una naturaleza pura y simple: independiente, universal, recto, 'cosas así'. Llama «Relativo» a lo que envuelve cosas como: dependiente, desigual, parcial, 'cosas así'.

¿Qué es el hombre? (Y la mujer, naturalmente). Un ser más inclinado a lo relativo que a lo absoluto. Quizá por eso cambia tanto de opinión. Cambia tanto de comportamiento. Un hombre ejemplar va y se convierte en un corrupto. ¿A qué se debe el cambio? Habría que preguntárselo a Freud.
Es el caso de un hombre ejemplar, según Rajoy: «Vamos a hacer en España lo que Jaume ha hecho en Baleares (27-11-2004)». Jaume Matas. Un hombre corrupto: los ciudadanos lo llamaban ayer ladrón y chorizo.
La cagó Rajoy, entonces. Han acertado los ciudadanos, ahora. 
La volubilidad se prende en las manos, pegajosas de tanto meterlas en el dinero público.